El presidente Ma Ying-jeou reiteró el 20 de mayo que la República de China está avanzando en la dirección correcta y que las políticas gubernamentales existentes deben continuar a fin de alcanzar la prosperidad del pueblo después que concluya su segundo y último mandato presidencial.
Ma hizo tales afirmaciones durante un evento en el Palacio Presidencial para conmemorar el séptimo aniversario de su mandato presidencial, al que asistieron unos 170 asesores de política, altos funcionarios y beneficiarios de diversas políticas gubernamentales.
“Los últimos siete años se han caracterizado por un desarrollo pacífico y próspero de las relaciones a través del Estrecho de Taiwan, así como por una posición más respetada y digna para Taiwan en el mundo”, expresó el Mandatario.
“Un verdadero punto culminante fue la bienvenida a Taiwan de casi diez millones de visitantes el año pasado; o sea, 2,6 veces la cantidad de visitantes antes de 2008. Estas visitas contribuyeron 13.050 millones de dólares estadounidenses de ganancias en divisas para la nación”, señaló el presidente Ma.
Taiwan ha alcanzado un gran progreso en materia de igualdad de géneros, lucha contra la corrupción, promoción de la justicia social por medio de reformas arancelarias y la búsqueda de un desarrollo regional equilibrado a través de importantes proyectos de infraestructura, afirmó el Mandatario.
“Asumí el cargo en medio de la crisis financiera mundial que colocó a la economía mundial en gran riesgo”, dijo el Mandatario, agregando que en respuesta, “el Gobierno tomó medidas inmediatas, lanzando siete rondas consecutivas de reducciones de las tasas de interés y emitiendo protección total para todos los depósitos bancarios”.
En un esfuerzo por impulsar la economía local, el Gobierno emitió cupones de consumo por un valor de 117 dólares estadounidenses para determinados beneficiarios de enero a febrero de 2009. Esta medida alentó la confianza de los consumidores y fue ampliamente elogiada por el público así como por economistas locales y del extranjero.
“Tal medida sin precedentes ayudó a la economía local a crecer 10,62 por ciento al año siguiente, el mejor desempeño en 24 años y el cuarto más alto en el mundo”, indicó Ma.
Pero la prosperidad de la nación depende de más que las políticas inteligentes del Gobierno, reflexionó el Presidente; agregando que cada miembro de la sociedad –especialmente los jóvenes– juega un papel en el proceso.
“Un proyecto para capacitar jóvenes con talento, iniciado en 2009, ha beneficiado a más de 260 mil individuos, con más del 80 por ciento de los participantes consiguiendo empleos una vez concluida su capacitación”, añadió el Mandatario.
Otras medidas para satisfacer las necesidades específicas de la generación más joven incluyen permisos de trabajo para los padres y servicios de guardería, con 310 mil padres y 270 mil niños resultando beneficiados por los subsidios gubernamentales que superaron los 32.600 millones de dólares nuevos de Taiwan durante los últimos siete años, según el Mandatario.
Otra política exitosa fue la iniciativa para animar a los jóvenes a incursionar en la agricultura, mencionó el presidente Ma, explicando que “esta medida revitalizó el sector, reduciéndose la edad promedio de los agricultores de 62 a 45 años; y también ayudó a reducir los terrenos baldíos de la nación a la mitad”.
Ma aseveró que estos logros no hubiesen sido posibles sin el desarrollo pacífico de las relaciones a través del Estrecho de Taiwan. Estos resultados también son fruto de la firme postura del Gobierno de mantener el status quo de la no unificación, no independencia y no uso de la fuerza conforme a la Constitución de la República de China.
“Mayores intercambios bilaterales resultaron en dividendos económicos y contribuyeron a fomentar la cultura, educación e interacciones sociales entre los pueblos de ambos lados, pavimentando el camino para la paz sostenible a través del Estrecho de Taiwan”, afirmó el presidente Ma.
En vista de los altibajos de su mandato presidencial, Ma subrayó que cada revés y la subsiguiente recuperación reafirmaron su confianza en las políticas gubernamentales y fortalecieron su profundo respeto por la amabilidad y la valentía del pueblo.
“Deseo expresar mi sincero aprecio y gratitud al pueblo por sus esfuerzos incesantes a fin de contribuir a la prosperidad y seguridad de Taiwan”, concluyó el Mandatario; agregando que “el tiempo que me queda en la Presidencia será invertido en la promoción de la reconciliación y la unificación de todos los miembros de la sociedad”.