El Gobierno de la Ciudad de Tainan anunció el 12 de febrero la culminación de las operaciones de rescate en el complejo de apartamentos colapsado en dicha ciudad del sur de Taiwan. El seísmo que azotó la isla en tempranas horas del 6 de febrero, justo cuando los ciudadanos se preparaban para celebrar el Año Nuevo lunar, derribó al menos diez estructuras en la citada urbe sureña. Sin embargo, la mayor devastación aconteció en el complejo de edificios de 17 pisos llamado Weiguan Jinlong, en el área de Yongkang de la ciudad de Tainan.
El alcalde de la ciudad de Tainan, Lai Ching-te, dio por concluidas las labores de rescate cuando fue recuperado el cuerpo de la última víctima, 180 horas después de que ocurriera el terremoto.
Funcionarios del Gobierno de la Ciudad de Tainan informaron que de las 116 víctimas mortales, 114 fallecimientos acontecieron en el complejo Weiguan Jinlong. Las otras dos víctimas fueron en el área de Guiren, y murieron por caída de objetos pesados.
En todo Tainan, 507 personas fueron hospitalizadas por efecto del seísmo, de las cuales 438 ya han sido dadas de alta.
Lai informó que el Gobierno de la Ciudad de Tainan ha recibido más de dos millones de dólares estadounidenses en donaciones para las víctimas, y prometió emplear esos fondos para ayudar a los afectados y a sus familias a reconstruir sus vidas.
Por otro lado, tres personas, incluyendo el ex presidente y dos arquitectos de la compañía que construyó el complejo Weiguan Jinlong fueron arrestados bajo cargos de causar muerte por negligencia. Se cree que el uso de materiales inadecuados con el fin de reducir costos haya sido una de las causas del colapso del edificio.
Asimismo, las operaciones de reconstrucción en las zonas afectadas por el terremoto seguirán las directrices adoptadas en una reunión del Yuan Ejecutivo (Gabinete) que se realizó el 14 de febrero en el Centro de Operaciones de Emergencia del Gobierno Central. Según la misma, el Gobierno dará prioridad a los fondos de compensación y préstamos para viviendas a las víctimas del terremoto del 6 de febrero.
El primer ministro Simon San-cheng Chang, quien presidió la reunión, estableció seis tareas prioritarias, incluyendo la suspensión de los pagos de préstamos de vivienda para los supervivientes, al igual que la aceleración de los trámites de compensación por seguros.
El Gobierno también estará a cargo de las investigaciones en el lugar del terremoto, la reparación de las tuberías de agua, represas y diques dañados; así como la revisión de los reglamentos de construcción.
La reunión también estableció el principio de hacer a los gobiernos locales responsables de la reconstrucción, con el apoyo del Gobierno Central.
El gobierno local será responsable de la distribución de dinero por los fallecidos y heridos graves, la asistencia en la reubicación de las víctimas del terremoto y su asistencia sicológica, los subsidios para alquiler de viviendas; así como la demolición y reparación de los edificios en condiciones precarias.
Por su parte, el presidente Ma Ying-jeou visitó el Centro de Operaciones de Emergencia del Gobierno Central el día 14 y solicitó al Yuan Ejecutivo elaborar un plan para reforzar los edificios a fin de soportar mejor los terremotos.