El Ministerio de Relaciones Exteriores (MOFA, siglas en inglés) protestó enérgicamente el 17 de enero por la supresión del nombre de Taiwan según directrices planteadas en el Libro Azul Informe Anual sobre el Estado de derecho en Internet en China 2018.
En dicho libro publicado por el Instituto de Derecho, la Academia China de Ciencias Sociales y el Centro de Investigación para el Desarrollo del Internet de la Universidad de Pekín, se acusa a 66 empresas extranjeras multinacionales que se encuentran entre las 500 empresas más importantes del mundo, como por ejemplo: Apple, NIKE, Amazon y Siemens, de “no cumplir” con la designación de Taiwan como “parte de China”. Por ello, en el libro se argumenta que dichas compañias deben ser penalizadas de acuerdo a la ley debido a tal falta.
El MOFA ya había expresado su fuerte protesta y severa condena a las autoridades chinas luego de que forzaron el año pasado a varias aerolíneas y corporaciones multinacionales a cambiar las nomenclaturas para Taiwan en sus sitios web.
En esta nueva nota de protesta del día 17, el MOFA advirtió a China que al imponer su propia jurisdicción administrativa y pensamiento político en el resto del mundo no solo exponen sus intenciones políticas de interferir con las empresas privadas, sino que también violan el espíritu de la libertad comercial internacional.
Por otro lado, el MOFA hizo en esta ocasión un llamado a la comunidad internacional para que no quede en silencio ni tolere esta actitud de China, sino que tome las medidas necesarias para ayudar a sus empresas a resistir las demandas irracionales del lado chino.
Una vez más, el MOFA reiteró a China debe enfrentar la realidad de que Taiwan no es en modo alguno una provincia de la República Popular China y no está sujeto a la jurisdicción del Gobierno en Pekín. Cualquier supresión de Taiwan, aseveró el MOFA, solo causará disgustos al pueblo de Taiwan y socavará el desarrollo de las relaciones a través del Estrecho, así como la paz y la estabilidad regionales.