02/05/2024

Taiwan Today

Taiwán Hoy

PANAMA Y LA REPUBLICA DE CHINA: FORJANDO JUNTOS UN FUTURO MEJOR

01/07/2016
La presidenta Tsai Ing-wen (izquierda) y el presidente panameño, Juan Carlos Varela Rodríguez, pronuncian sendos discursos en el Salón Amarillo del Palacio de las Garzas en Panamá.
Panamá es un importante socio comercial y aliado diplomático de la República de China. Las mutuas colaboraciones han traído grandes beneficios a ambos.

En su edición del primero de abril de 1854, el Panama Herald anuncia la llegada en el día anterior del bergantín Sea Witch con 705 obreros chinos contratados para trabajar con la Compañía del Ferrocarril de Panamá. Estos pioneros chinos colaboraron en la construcción del ferrocarril, que posteriormente sería el primer ferrocarril transcontinental y transoceánico del mundo.

Este hecho histórico ha sido tradicionalmente tomado como el inicio de la llegada de los primeros inmigrantes chinos a Panamá, en momentos cuando todavía era un departamento de la entonces Gran Colombia.

Sin embargo, la presencia de súbditos del entonces Celeste Imperio ha sido registrada mucho antes del incidente arriba citado. De hecho, se conoce que los primeros inmigrantes chinos llegaron a Panamá poco después de la infausta Rebelión Taiping. La Rebelión Taiping fue, de hecho, una guerra civil con grandes connotaciones religiosas y sociales, que ocurrió en China de 1851 a 1864. Durante este período, la entonces reinante dinastía Ching (Qing, 1644-1912) se enfrentó a las crecientes fuerzas de los sublevados por la causa Taiping.

La Rebelión Taiping fue un hecho histórico muy complejo; superficialmente, era la lucha de un grupo en rebeldía. Al fondo, era un deseo de reinvidicación de la etnia mayoritaria han ante la tiranía de los manchúes, tribu invasora proveniente del noreste de China. Aparte de eso, también fue un enfrentamiento religioso, entre la fe cristiana del bando Taiping y las ancestrales creencias religiosas chinas. También fue una revolución de masas, donde los pobres se levantaron contra los ricos.

Debido a la incertidumbre e intranquilidad que reinaba en China, muchos ciudadanos decidieron emigrar a otros países. Aquéllos más acaudalados viajaron hacia el Sudeste Asiático, donde adquirieron grandes propiedades y haciendas; desarrollando generalmente una exitosa gestión económica que les permitiría retornar con frecuencia a su lar nativo debido a la cercanía geográfica.

Los más humildes, tuvieron que contentarse con seguir con su difícil vida en el país o aventurarse a otros países lejanos y exóticos; engañados muchas veces de la manera más vil por traficantes de mano de obra semi-esclava. A estos desdichados se les engañó con promesas de una “Montaña Dorada” en las Américas. Así, muchos terminaron desembarcando en Cuba, Panamá, Perú y otros países del Hemisferio Occidental. La mayoría de ellos nunca logró volver a la tierra de sus antepasados.

Con la fundación de la República de China en 1912, tras los esfuerzos revolucionarios liderados por el Dr. Sun Yat-sen, la colonia china en Panamá recibió júbilosamente la llegada de la era moderna en China, plegando incondicionalmente su lealtad a la Madre Patria. De hecho, Panamá fue uno de los primeros países del mundo en reconocer oficialmente a la nueva nación asiática.

Desafortunadamente, surgieron muchas facciones en las distintas regiones de China, siendo necesario que Chiang Kai-shek llevase a cabo la Expedición al Norte, que terminó unificando finalmente al país.

La presidenta Tsai Ing-wen (centro, primera fila) junto con otros Mandatarios y funcionarios invitados posan en una foto de grupo tras los actos de inauguración del Tercer Juego de Esclusas en Panamá.

Mas no fue una garantía para la paz en la nación, ya que a inicios de la década de 1930, los militaristas japoneses comenzaron a ocupar el territorio chino, y finalmente, se desató la Guerra Sino-Japonesa, que el Ejército de la República de China tuvo que librar de 1937 a 1945. Los primeros años de la contienda, China tuvo que combatir sola al invasor japonés. Sólo en los últimos años de la guerra, los Aliados se unieron a la lucha.

Terminada la Guerra Sino-Japonesa, se produjo la insurrección de los comunistas, que finalmente ocuparon el territorio continental y obligó al Gobierno de la República de China a trasladarse en 1949 a Taiwan; donde ejerce su soberanía hasta el día de hoy.

Durante la década de 1960, la República de China comenzaba su despegue económico y superaba definitivamente la crisis de una inminente invasión chino-comunista. En ese entonces, el Gobierno decide reforzar en forma pragmática sus relaciones con Panamá.

El presidente Chiang Kai-shek envía como embajador a uno de sus más allegados colaboradores, el general Huang Jen-lin, asesor militar del Generalísimo.

El embajador Huang arribó a Panamá en 1965 y permaneció en el istmo durante una década. Su gestión fue decisiva en el afianzamiento y posterior profundización de los lazos entre ambos países. Poco después, el Central Trust of China, la institución de fideicomiso del Estado, abre un centro de exhibición de productos taiwaneses en la Zona Libre de Colón.

Huang también gestionó la llegada de la Misión Técnica Agrícola de la República de China, que inició formalmente sus operaciones en 1970, en Hato de Jesús, Montijo, provincia de Veraguas. La Misión ha contribuido en forma ininterrumpida hasta el día de hoy al desarrollo de la tecnología agropecuaria en el país. Actualmente, es conocida como la Misión Técnica de Taiwan.

En 1980, se fundó el Centro Cultural Chino-Panameño, una organización cívico-cultural en la ciudad de Panamá. Dentro del mismo funciona el Instituto Sun Yat-sen, que imparte educación hasta el nivel secundario. En la actualidad, es el centro más importante de difusión de la lengua y cultura chino-taiwanesa en el área de Centroamérica y el Caribe.

Como parte del Centro Cultural Chino-Panameño, se construyó el Parque de la Amistad Chino-Panameña, que fue inaugurado en 1987. La parte central del mismo cuenta con una plazoleta al estilo chino con las estatuas de los doctores Manuel Amador Guerrero, prócer de la Independencia de Panamá; y Sun Yat-sen, fundador de la República de China.

Desde el reestablecimiento de las relaciones diplomáticas, interrumpidas por la Guerra Civil en China; con el envío del primer embajador a Panamá en 1954, ambos países han ido fortaleciendo sus lazos en todos los aspectos de las relaciones bilaterales. Al respecto, Panamá y la República de China han firmado varios acuerdos, convenios y tratados que cubren aspectos culturales, comerciales, de cooperación técnica, protección a las inversiones, transporte aéreo y libre comercio.

Al mismo tiempo, Panamá también ha correspondido al fortalecimiento de las relaciones bilaterales con el envío de embajadores que se han esforzado por procurar mejores canales de comunicación con las autoridades panameñas, así como atraer inversiones taiwanesas al país istmeño.

En agosto de 2009, se firmó el Tratado de Libre Comercio entre los dos países, el primero que rubrica la República de China con otro país. El mismo otorga exenciones arancelarias para unos 4.200 productos y servicios de Taiwan, y 6.200 productos y servicios de Panamá.

Ejecutivos de la empresa naviera Evergreen Marine Corp., explican a la presidenta Tsai Ing-wen y su comitiva acerca del buque de contenedores de la compañía que pasa por las esclusas del Canal de Panamá.

Por otro lado, la República de China siempre envía una numerosa delegación para participar en Expocomer, una exposición comercial que se realiza anualmente en Panamá, cubriendo los sectores de alimentos, textiles, construcción, tecnología, servicios y otros.

Entre los múltiples campos de la cooperación bilateral, sobresale la asistencia que Taiwan brinda a las instituciones escolares, incluyendo la construcción de nuevas instalaciones educativas.

El ex embajador de la República de China en Panamá, Diego L. Chou, cuenta de una anécdota curiosa cuando fue inaugurada una escuela donada por Taiwan en Pacora, en la región oriental de la provincia de Panamá. Un diario local publicó una nota donde criticaba la “donación millonaria” en un barrio de pobres.

Al respecto, Chou comenta que es la norma de la asistencia que brinda la República de China. Se entrega un paquete completo, indistintamente cuál sea la institución receptora. Es decir, no se entregará una donación menor debido a que una escuela sea más pobre o se encuentre más apartada.

En un recorrido por dichas instalaciones, aparte de las aulas, se encuentra un amplio campo de juegos, un salón de actos, una cocina bien equipada, así como un comedor con capacidad suficiente para atender a todos los alumnos. Por un momento, pareciera que se está en plena ciudad, pero pronto se observa que no es así cuando se aprecia la cerca que separa la escuela del bosque cercano.

En la cultura china, la educación es el mejor legado que se puede dejar a los descendientes, y ese es el ideal que guía la asistencia que brinda Taiwan a la educación de otros países con la esperanza de formar mejores ciudadanos que forjen un mejor futuro para el país anfitrión.

Otra área a la que la República de China da prioridad al momento de decidir la asistencia al exterior es la salud. En este sentido, se han donado equipos, medicamentos y hasta instalaciones hospitalarias completas. En cierta ocasión, en la ceremonia de inauguración de un hospital en la provincia de Bocas del Toro, un humilde ciudadano local se acercó al embajador de la República de China y le manifestó su agradecimiento, y reveló que el pueblo estuvo esperando durante casi cuarenta años para que hubiese una clínica que atendiera a los enfermos. Estaba visiblemente conmovido.

La presidenta Tsai Ing-wen, en su primer viaje al exterior tras asumir el cargo, eligió a Panamá y Paraguay como destinos de su gira. Esto comprueba lo que ha manifestado en varias ocasiones al recibir delegaciones panameñas: la República de China siempre ha mantenido relaciones muy amistosas y cordiales con Panamá.

Los censos más recientes en Panamá ya no catalogan al individuo por su origen étnico y por lo tanto, ya no se tienen datos exactos de cuántos ciudadanos son de origen chino. Generalmente se estima que entre un 10 al 12 por ciento de la población total de Panamá es de origen chino. Por otro lado, algunos autores incluso consideran que los panameños con ascendencia china podrían llegar hasta 35 por ciento; pero lo más probable es que oscile alrededor del 25 por ciento. Nos referimos incluso a personas que no poseen rasgos físicos orientales, pero tienen algún apellido chino en su ascendencia.

De la tradicional imagen del “chinito de la abarrotería”, la comunidad chino-taiwanesa en Panamá se ha integrado totalmente en la fibra humana de la nacionalidad panameña, llegando a sobresalir en todas las gamas del ramo profesional y aportando sus indelebles contribuciones en la economía, costumbres, gastronomía y cultura del istmeño país.


Opiniones sobre las relaciones con Panamá

Javier Ching-shan Hou
Vicecanciller
(Foto de Chin Hung-hao)

¿Nos puede resumir el estado actual de las relaciones entre Panamá y la República de China?

En realidad, nuestras relaciones con Panamá han sido siempre bastantes estables. Pero, en los últimos años, este tema ha sido frecuentemente mencionado en los medios de comunicación e incluso en programas de televisión, dando a entender que hay cambios o posibles desviaciones (en las relaciones).

A nuestro modo de ver, no existen tales situaciones. Obviamente, en todas las familias existen querellas entre sus miembros, hasta los novios también discuten entre sí. De igual manera, a veces pueden existir diferencias de opiniones en torno a ciertos temas entre dos países; pero ésto no significa que exista una crisis entre ellos. Por esa razón, particularmente, le puedo asegurar que tenemos plena confianza en nuestras relaciones con Panamá, que son bastantes estables.

En junio pasado, la presidenta Tsai Ing-wen encabezó personalmente una delegación oficial que asistió a la ceremonia de inauguración del Tercer Juego de Esclusas en el Canal de Panamá. La presidenta Tsai y su comitiva recibieron la más cordial atención de todos los estratos sociales, desde el Presidente en adelante. Pudimos sentir la grata hospitalidad, sinceridad y amistad del pueblo panameño. Esto nos comprueba una vez más que las relaciones entre Panamá y la República de China son firmes y estables.

Muchos visitantes que llegan a Taiwan nos expresan que virtualmente en todas las escuelas en Panamá encontramos donaciones de la República de China. ¿Qué nos puede decir al respecto?

Nuestras relaciones con Panamá cubren muchos aspectos. Aparte de las relaciones políticas que mencioné; se incluyen estrechos intercambios en las áreas de salud, educación, cultural, y otros. En el área educativa, existen varios proyectos de asistencia, incluyendo los intercambios a nivel universitario y el ofrecimiento mutuo de becas. Todos los años, hay una o dos decenas de jóvenes estudiantes de uno de los dos países que van a estudiar al otro país. Esto, obviamente, viene a constituir una base muy importante en las relaciones bilaterales.

Por otro lado, existe una considerable cantidad de compatriotas nuestros en ultramar y por ende, existe una necesidad de la enseñanza del idioma chino. Todos los años, la Comisión para los Asuntos de Compatriotas en Ultramar realiza constantemente donaciones de materiales de instrucción para que sean utilizados por el Centro Chino-Panameño en la enseñanza del idioma chino a los alumnos, utilizando los caracteres chinos tradicionales. También se incluyen ayudas de instrucción y otros materiales de enseñanza. En este sentido, podemos decir que (estos programas) han sido exitosos.

Se dice que en Panamá existen los “viejos” y “nuevos” miembros de la colonia chino-taiwanesa; ¿cómo podemos encontrar un equilibrio en nuestras relaciones con estos dos sectores?

En todo el mundo encontramos compatriotas de ultramar. Algunos de ellos se han radicado allí desde hace mucho tiempo y otros han llegado más recientemente. En Panamá, encontramos descendientes de compatriotas de ultramar que llegaron allí hace más de un siglo; así como otros que han llegado en las décadas recientes. Para nosotros, los compatriotas de ultramar son compatriotas nuestros y no los dividimos en “nuevos” o “viejos” compatriotas. Prestamos nuestros servicios a todos los que apoyan a la República de China, comparten nuestros ideales, y apoyan a nuestro Gobierno. Por eso, al asumir el poder el actual Gobierno, ya sea la presidenta Tsai o el ministro Wu Hsin-hsing, del Consejo para los Asuntos de los Compatriotas en Ultramar, han manifestado que estamos al servicio de todos los que apoyan al Gobierno. Por eso, para nosotros no existen “nuevos” o “viejos” compatriotas.

Usted acompañó a la presidenta Tsai en su visita de Estado a Panamá. ¿Qué fue lo que más le impresionó de la gira?

En la reunión entre los dos Mandatarios, pude notar un ambiente de sinceridad. En español, diríamos sinceridad, cordialidad y espontaneidad. El encuentro fue uno entre amigos sinceros, y no un simple acto protocolar de la diplomacia. Fue como el encuentro entre unos viejos amigos. Así que en realidad, las relaciones entre nuestros dos países no son cómo lo pintan algunos medios de comunicación, que se encuentran en crisis, etc. Desde el Presidente, hasta los miembros del Gabinete, sostuvimos conversaciones muy amenas en nuestras reuniones, y tratamos todos los temas en forma franca y sincera. Fue una interacción muy positiva.

Seguiremos fortaleciendo las relaciones bilaterales. Panamá ocupa una muy importante posición geográfica. El Canal de Panamá es un eje primordial en la comunicación entre los dos Oceános, por esa razón, hemos dado siempre suma importancia a nuestras relaciones. Obviamente, seguiremos explorando formas de fortalecer aún más los lazos que nos unen, basados en los principios de reciprocidad y beneficios mutuos, apoyándonos y ayudándonos mutuamente.


Diego L. Chou
Ex-embajador en Panamá
(Foto de Chin Hung-hao)

¿Nos podría hablar acerca de su misión en Panamá como Embajador de la República de China?

Llegué en enero de 2012 a Panamá para asumir a mi cargo. Estuve allí por espacio de 3 años y 9 meses, en los cuales impulsamos algunos proyectos que me parecen significativos. Asimismo, hemos dado asistencia tanto al Gobierno, como a nuestros amigos panameños.

Por ejemplo, colaboramos con el Ministerio de Educación de Panamá para construir una escuela multi-funcional. Posteriormente, el Gobierno panameño decidió designar tal plantel como Centro Educativo República de China (Taiwan).

La instalación se encuentra en Pacora y puede albergar unos dos mil alumnos. Generalmente, en Panamá las escuelas no son muy grandes, por lo que es una institución de considerables dimensiones. El centro imparte clases desde primaria hasta el bachillerato.

En el área de Salud, también participamos en varios proyectos. Por ejemplo, tenemos el caso de Bocas del Toro, que es una provincia muy apartada de la capital; incluso más lejos que David (Chiriquí). Es limítrofe con Costa Rica. Allí se encuentra Isla Colón, que atrae anualmente muchos turistas y hay una considerable cantidad de compatriotas de ultramar que residen allí, ya que en el pasado cultivaban bananos para la United Fruit Company. También se dedicaban a otras actividades comerciales. Es decir, hay muchos compatriotas de ultramar allí.


José Han
Ministerio de Relaciones Exteriores
(Foto de Chin Hung-hao)

¿Nos puede describir brevemente cómo se encuentran las relaciones con Panamá?

Estuve en Panamá en el año 2003, en esa época ya se habían logrado excelentes resultados en los programas de cooperación bilateral. Lo más importante (de nuestra posición) era que los mismos pudiesen satisfacer las necesidades del pueblo. A través de todos estos años, estoy seguro que estos programas han recibido el reconocimiento general de la población. Un aspecto especial en nuestras relaciones con Panamá es la empresa Evergreen Marine Corporation, que ha hecho importantes inversiones allí y ésto ha permitido no sólo un enfoque práctico en nuestras relaciones, sino que hemos alcanzado sobresalientes logros en las relaciones económicas y comerciales entre las dos naciones.

Por otro lado, hemos insistido ante el nuevo Gobierno de Panamá que la cooperación entre los dos países debe estar basada en la reciprocidad y mutuo beneficio. Por esa razón, seguimos alentando y orientando a nuestros empresarios para que inviertan en Panamá. Aparte de la asistencia y la cooperación bilateral en términos generales, nuestros aliados diplomáticos también esperan que aumentemos las inversiones y podamos incrementar las oportunidades de empleo para sus ciudadanos. Los especialistas ven con buenos ojos el desarrollo económico en América Latina, que tiene mucho potencial de crecimiento.


Silvia Liu
Ministerio de Relaciones Exteriores
(Foto de Chin Hung-hao)

Relátanos un poco acerca de tu estadía en Panamá

El tiempo en que estuve asignada en Panamá fue de 2009 a 2014, precisamente durante el mismo tiempo de la Administración del presidente Ricardo Martinelli. Llegué cuando recién había ascendido al cargo y me fui cuando dejó el cargo. Me fui precisamente tras terminar de realizar los preparativos de la visita oficial en ocasión de la toma de posesión del nuevo Mandatario panameño. Durante este período de tiempo, uno de los aspectos más interesantes fue que estuve encargada de los asuntos de cooperación bilateral.

Me tocó participar en la ejecución de muchos de estos proyectos. Así, cuando se construía una escuela, visitaba la escuela; cuando construían un mercado, visitaba el mercado; cuando se inauguraba una planta potabilizadora de agua, iba a la potabilizadora.

¿Qué opinas de los panameños?

Me parece que resulta fácil hacerte amigo de los panameños; pero debes entenderlos, conocer sus inquietudes y necesidades. Debes ser su amigo comunicándote con ellos en su propio idioma, no con el castellano, sino con su propio lenguaje. Cuando te considere como su amigo, no temas que te venga a buscar por algún favor; ya que posiblemente te retribuya con otro favor en el futuro.

Me gusta mucho Panamá, porque mi experiencia allí fue muy buena. No me topé con ningún problema difícil de solucionar y considero que mi estadía allí ha sido interesante.


FOTOS CORTESIA DE LA PRESIDENCIA DE LA REPUBLICA DE CHINA

Popular

Más reciente