La República de China reconoce su responsabilidad como nación desarrollada para ayudar a mitigar los efectos de este desastre humanitario. Hasta la fecha, Taiwan ha donado suministros de asistencia por valor de más de ocho millones de dólares estadounidenses, tales como alimentos y equipo médico, a fin de asistir a aquéllos desplazados por los conflictos en el Medio Oriente.
A fin de entregar esta ayuda, la República de China ha colaborado con varios países y grupos humanitarios internacionales, incluyendo Jordania, la Santa Sede, Turquía, Estados Unidos, los Cuerpos Médicos Internacionales, la Organización de Caridad Hashemita de Jordania, y los Cuerpos de Misericordia con sede en Estados Unidos. Por ejemplo, Taiwan está colaborando con Estados Unidos a fin de suministrar más de 350 viviendas por valor de 1,15 millones de dólares estadounidenses a los refugiados en el norte de Irak.
Aún más, el Ministerio de Relaciones Exteriores de la República de China anunció en enero que contribuirá con 500 mil dólares estadounidenses a un proyecto de rehabilitación de pozos acuíferos que busca dar agua potable a los refugiados sirios en las gobernaciones de Irbid y Mafraq en el norte de Jordania. Taiwan está enviando técnicos expertos para asistir con esta iniciativa, que está siendo implementada por los Cuerpos de Misericordia y el Fondo de Cooperación y Desarrollo Internacional de Taiwan (TaiwanICDF, siglas en inglés), una organización para ayuda internacional apoyada por el Gobierno de la República de China. Según TaiwanICDF, una vez completado en junio, el proyecto beneficiará a más de 30 mil refugiados.
La República de China también ha estado colaborando con sus socios en la comunidad internacional a fin de establecer una respuesta efectiva ante la devastadora epidemia del virus Ebola en Africa Occidental. Esta epidemia activa, que comenzó en Guinea a finales de 2013, y que se esparció a Liberia, Sierra Leona y otros países de la región, ha cobrado hasta el momento más de nueve mil vidas.
Para ayudar a detener el avance del Ebola, el Gobierno de la República de China ha enviado cien mil unidades de equipo de protección personal a las áreas más afectadas. Asimismo, ha hecho una donación por más de un millón de dólares estadounidenses a la Fundación de los Centros para el Control de las Enfermedades de Estados Unidos a fin de asistir a dicha entidad en sus esfuerzos de respuesta ante este mortal virus.
Por otro lado, los funcionarios del Programa de Capacitación en Epidemiología de Campo de Taiwan, han estado en estrecho contacto con los centros para el control de las enfermedades en Nigeria y Estados Unidos a fin de discutir cómo la nación puede contribuir a los proyectos de asistencia médica. Igualmente, la República de China ha establecido una cooperación con Estados Unidos, a fin de iniciar un centro de capacitación regional en Taiwan, con el propósito de equipar a los trabajadores del sector de salud en la región de Asia y el Pacífico con las herramientas y el conocimiento necesario para responder en caso de que la epidemia del Ebola se esparza más allá de Africa.
Se requieren esfuerzos internacionales abarcadores a fin de enfrentar tanto la crisis humanitaria en el Medio Oriente como la epidemia del Ebola en Africa Occidental. La República de China, que por décadas ha sido un proveedor dedicado de ayuda exterior a las regiones en todo el mundo, observa detenidamente estas situaciones críticas a fin de determinar cómo puede brindar la mejor asistencia; y también está comprometida a colaborar estrechamente con sus socios gubernamentales y no gubernamentales para ayudar a aliviar el sufrimiento de aquéllos que más lo necesitan.