04/05/2024

Taiwan Today

Taiwán Hoy

EL REINO DE LAS BICICLETAS

01/06/2008

En los Juegos Olímpicos Atenas 2004, Gunn-Rita Dahle, de Noruega, del equipo de ciclismo Multivan Merida, cruzó la meta y ganó la medalla de oro en el evento de ciclismo de montaña cross-country en la categoría femenina. Desde 2004 hasta 2006, el equipo T-Mobile Road de Alemania ganó el trofeo por equipo en el Tour de Francia, a bordo de bicicletas Giant fabricadas con fibra de carbón. Ahora que se acercan los Juegos Olímpicos de Beijing, las corredoras del equipo de ciclismo femenino de China proyectan ganar la medalla de oro a bordo de bicicletas Giant.

Las compañías taiwanesas como Merida Industry Co., y Giant Inc. esperan que el éxito de los eventos de alto perfil, como el Tour de Francia y las Olimpíadas, las ayuden a dejar la imagen de fabricantes de equipos originales (OEMs, siglas en inglés) y ponerse a la cabeza entre las marcas de bicicletas de alta calidad del mundo.

En los años sesenta y setenta, gracias a la activa organización por parte del Gobierno de ferias comerciales internacionales, los fabricantes de bicicletas de Taiwan recibieron pedidos del extranjero e experimentaron su etapa inicial de crecimiento.

En los años ochenta, los fabricantes de bicicletas de Taiwan lograron mayor presencia en los mercados internacionales y prosperaron como OEMs con el uso de equipo y tecnología modernos. Como ocurrió con los juguetes y sombrillas, las exportaciones de bicicletas de Taiwan alcanzaron la cumbre en los años ochenta. En la industria, Taiwan era conocida como el “Reino de las bicicletas”. En 1986, los fabricantes taiwaneses exportaron más de 10 millones de bicicletas, que se vendían a un promedio de US$41 por unidad.

Sin embargo, a finales de los noventa, la mayoría de los fabricantes taiwaneses de bicicletas afrontaron la intensa competencia de rivales que fabricaban productos más baratos en China y el Sureste de Asia, donde los costos de mano de obra y tierra eran mucho más bajos. La industria doméstica de las bicicletas corrió el peligro de convertirse en una industria en decadencia, y en ese entonces muchas compañías cerraron sus plantas en Taiwan y se trasladaron al exterior.

La reacción de algunos fabricantes locales de bicicletas frente a la nueva situación, fue concentrarse en la creación de una marca a fin de sobrevivir —y prosperar. Aunque el volumen de exportación disminuyó durante la última década, el valor total y el precio promedio de exportación de bicicletas hechas en Taiwan, gozaron de continuo aumento.

Según las estadísticas recopiladas por la Asociación de Exportadores de Bicicletas de Taiwan (TBEA, siglas en inglés), las exportaciones de bicicletas de Taiwan alcanzaron 4,1 millones de unidades, a un costo promedio de US$207 por unidad, y generaron US$839 millones en ganancias en 2006, en comparación con 4,8 millones de unidades a US$112 cada una, y un total de ganancias de US$536 millones en 2001.

“El aumento del precio promedio durante los últimos 10 años indica el progreso sostenido de los fabricantes de bicicletas hacia productos de alta calidad y alto valor agregado”, dice James Liu, secretario general de TBEA. “Su rica experiencia de mercadeo y buen servicio después de las ventas, les abre el camino del éxito en países industrialmente avanzados, al tiempo que evitan la guerra de precios con los fabricantes de bicicletas baratas de China”.

Las estadísticas de TBEA muestran que en 2006 Estados Unidos era el primer destino de las bicicletas de Taiwan, seguido del Reino Unido, Alemania y Japón. En el mercado internacional de bicicletas de alta calidad (cuyo precio mayorista oscila generalmente entre US$150 y $2.000), con un volumen de aproximadamente 5 millones de unidades al año, Taiwan ocupa ahora el 80 por ciento del mercado. Los precios al detal de estas bicicletas de alta calidad son generalmente más del triple de los precios al mayor para exportación.

“Hoy la industria de bicicletas de Taiwan es sólida por su excelente capacidad de fabricación, diseño y mercadeo, así como sus marcas famosas y los canales de venta”, dice Edward Liao, director general del Centro de Investigación y Desarrollo de la Industria Tecnológica para el Ciclismo y la Salud (CHC, siglas en inglés). “Además, los fabricantes de bicicletas y sus partes relacionadas se esforzaron conjuntamente para crear una cadena de suministro eficiente que responde rápidamente a las tendencias y necesidades del mercado”.

Taiwan tiene más de 50 años de experiencia manufacturera, y sigue siendo un importante sitio de producción para famosas marcas internacionales de bicicleta, como Colnago de Italia, Trek and Specialized de Estados Unidos, Scott de Suiza, Panasonic de Japón, y las divisiones de bicicleta de BMW, Mercedes-Benz y Porsche de Alemania.

El centro de Liao, establecido en 1992 como un centro de investigación y desarrollo para la industria de bicicletas de Taiwan, es una fuerza positiva que ayuda a consolidar la competitividad internacional de la industria de bicicletas de la nación. Esta organización sin fines de lucro, financiada en un 51 por ciento por el Buró para el Desarrollo Industrial del Ministerio de Economía, y el 49 por ciento restante por los representantes de la industria, fue asignada para investigar y desarrollar las tecnologías relacionadas con las bicicletas, hacer pruebas y brindar servicios de certificación para el control de calidad, y elevar el nivel de estandarización de las bicicletas y sus partes.

Grandes innovaciones

CHC ha establecido varios laboratorios equipados con maquinaria avanzada y sistemas de tecnología de la información, tales como diseño computarizado tridimensional, equipo para prueba de materiales, tecnologías de producción y conceptos de diseño.

Además, en 1996 el centro comenzó a organizar una competencia de diseño local, que luego se convirtió en un evento internacional anual en 1998. La Competencia Internacional de Diseño para Bicicletas acepta más de 1.000 participantes de alrededor de 50 países cada año. Un total de 24 proyectos fueron premiados con NT$500.000 (US$15.500) cada uno. El centro también trabaja con los diseñadores para explorar las posibilidades de comercializar sus diseños.

“Queremos que esta competencia sea un canal de comunicación para los diseñadores, fabricantes y aficionados a las bicicletas de todo el mundo”, dice Liao. “Con suerte, una variedad de conceptos e ideas de diseño pueden mejorar la funcionalidad, apariencia y desempeño de las bicicletas, y así, elevar su popularidad para que se conviertan en herramientas de la vida cotidiana”.

Desde el pasado octubre, CHC firmó un contrato con la Asociación de Bicicletas (Japón), para que las bicicletas fabricadas en Taiwan se certifiquen para la venta en Japón antes de ser enviadas. Liao agrega que esto subraya los altos estándares alcanzados por la industria de las bicicletas de Taiwan.

De hecho, con Giant y Merida a la cabeza, los fabricantes de bicicletas del país garantizaron clientes leales entre los comerciantes independientes y consumidores de bicicletas de todo el mundo. Las bicicletas hechas en Taiwan se reconocen ampliamente como productos de alta calidad.

En particular, actualmente, Giant sobresale como marca líder en Taiwan y China, una de las tres marcas principales en Estados Unidos y Europa, y la mayor marca de importación en Australia, Canadá, Japón y Holanda.

Giant disfrutó de un crecimiento consistente de ventas mayor del diez por ciento durante los últimos años, y sus ingresos se elevaron de NT$14.500 millones (US$450 millones) en 2001 a NT$27.000 millones (US$840 millones) en 2006. Se convirtió en el primer fabricante de bicicletas del mundo. Los productos Giant recibieron muchos honores, y han ganado nueve veces el Premio Nacional de Oro a la Excelencia de Taiwan, así como el Premio de Diseño de Producto IF de Alemania y el Premio Business Solutions´Pinnacle de Microsoft. Los productos de Giant han ganado también distinciones como bicicleta del año en revistas de ciclismo en Estados Unidos y Europa.

Ventaja competitiva

“Mucha gente está preocupada por el debilitamiento de las industrias de Taiwan”, dice Jeffrey Sheu, portavoz de Giant. “Queremos que la industria de las bicicletas sea un modelo para demostrar que Taiwan posee sólidas ventajas industriales. Con este objetivo, nuestra compañía puso en marcha un proceso de cinco etapas, que incluye la fabricación, la investigación y desarrollo, la promoción de marca, el despliegue de canales de distribución mundial y la asociación con minoristas”.

Giant desarrolló su capacidad manufacturera internacional con el establecimiento de ocho fábricas en China, Taiwan y Holanda, para producir desde bicicletas baratas hasta las de mayor nivel. Al mismo tiempo, la compañía estableció 11 sedes regionales en el extranjero y 10.000 tiendas en casi 50 países, y vende sus productos solamente a través de agentes autorizados de bicicletas. En los centros de investigación y desarrollo de China, Taiwan, Estados Unidos y Holanda, Giant emplea alrededor de 150 profesionales que son los responsables de las innovaciones tecnológicas, de materiales y diseño. En 1987, Giant se convirtió en el primer fabricante del mundo en producir en masa estructuras y partes de bicicleta, hechas de compuesto de fibras de carbono. Sheu dice que el peso de una bicicleta puede reducirse a 6,5 kilogramos con la fibra de carbón.

El principal fabricante de bicicletas en Taiwan desarrolló igualmente estructuras de suspensión trasera eficiente para bicicletas de montaña, para una carrera sin dificultad sobre terrenos ásperos y cuestas empinadas. Un reto clave en el desarrollo de estas estructuras fue la reducción del impacto en el sistema de suspensión causado por el movimiento del ciclista.

Sheu dice que su empresa estableció una red mundial de fabricación y mercadeo para ofrecer entregas rápidas, asistencia de ventas y servicios después de la venta, y también destinó el 8 por ciento de sus ingresos anuales para el mercadeo y la creación de marca.

“Desde su establecimiento en 1972, nuestra compañía se ha desempeñado bien en el negocio OEM. Aún así, sabemos que nuestro futuro depende del mercadeo de nuestras propias marcas, por esa razón comenzamos a promover nuestra marca domésticamente en 1981 y en el exterior en 1986”, dice. “Nuestra marca se convirtió en nuestro activo más valioso. En la actualidad, el 70 por ciento de nuestras ventas procede de nuestros productos de marca”. En 2006, la marca Giant fue valorada en US$250 millones por Interbrand, una consultoría de marcas internacionales.

Sheu agrega que una parte importante de la estrategia para la promoción de marca es el patrocinio de equipos de ciclismo. El patrocinio del Equipo T-Mobile Road Racing en el circuito internacional desde 2003 y su apoyo al equipo profesional de ciclismo femenino chino desde 2006 han servido para consolidar la reputación de la compañía.

Merida busca la presea dorada

Merida se dedica también a la promoción de su marca mediante el apoyo a ciclistas de élite. En 1998 la compañía comenzó a patrocinar importantes eventos y atletas del ciclismo, y en 2001 fundó su propio equipo.

En el presente, el Equipo de Ciclismo Multivan Merida está compuesto por siete atletas, incluyendo Gunn-Rita Dahle, de Noruega, y José Antonio Hermida, de España, quienes ganaron la medalla de oro en la categoría femenina de cross-country y la medalla de plata en la categoría masculina, respectivamente, en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004. Merida también logró los primeros lugares por equipo en la Copa Mundial desde 2003 hasta 2006, y Dahle ganó una presea dorada en cross-country a bordo de una bicicleta Merida en el Campeonato Mundial en 2006.

Wang Lung-chin, director asistente de Merida, dice que los sobresalientes logros del equipo de ciclismo de la compañía, han dado un impulso a la marca, lo que a su vez le proporciona la oportunidad de entrar en nuevos mercados. Además, Merida debe seguir su continuo avance en la investigación y desarrollo para satisfacer a los ciclistas de alto nivel, que exigen un excelente desempeño de sus bicicletas.

La empresa Merida fue establecida en 1972. Ha evolucionado a través de varias etapas de desarrollo. “Nuestras operaciones han cambiado con el tiempo, antes enfatizaban la producción, luego se centraron en la tecnología, y ahora en el mercadeo”, explica. “Las tecnologías de producción y las habilidades administrativas que fomentamos a través de nuestro negocio OEM, así como la promoción de nuestras marcas y canales de venta, han brindado a la compañía un crecimiento sostenido”.

En los últimos años, Wang dice que su compañía se dedicó al desarrollo de productos “3N”, que enfatiza nuevos materiales, nuevas funciones y nuevos usos. A través del desarrollo “3N”, la compañía pretende hacer productos más ligeros, de mayor desempeño y que satisfagan las necesidades de diferentes grupos de consumidores.

Uno de los logros de Merida, agrega, fue el lanzamiento de bicicletas de montaña con estructuras de aleación de magnesio y aluminio. Las bicicletas ligeras pero resistentes debutaron en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004.

Gracias al énfasis en la marca e innovación del producto, Merida experimentó un incremento de sus ventas, de NT$6.000 millones (US$180 millones) en 2005 a NT$6.900 millones (US$215 millones) un año después, y el precio promedio de una unidad subió de US$377 a US$405 durante ese mismo período.

Otro factor detrás del continuo desarrollo de la industria de las bicicletas de Taiwan es la habilidad de cooperar que tienen las compañías domésticas en tiempos de crisis. En 1998, la Unión Europea impuso impuestos antidúmping que oscilaban entre 2,4 a 18,2 por ciento para las bicicletas hechas en Taiwan. Los impuestos se mantuvieron durante cinco años. Durante ese período, los fabricantes chinos empezaron una guerra de precios para ganar parte del mercado.

En vista de la situación, los líderes de la industria Giant y Merida se dieron cuenta que era necesario cooperar con el objetivo de mejorar la calidad de sus productos, la eficiencia de la producción y el plazo de entrega. Así, las dos compañías persuadieron a otros fabricantes de bicicletas y partes, con sede en Taiwan, para formar una alianza, llamada el “Equipo A”.

“Si queríamos seguir en Taiwan, era esencial hacer algo diferente de las bicicletas producidas en masa y de bajo precio de China. “Por eso decidimos comenzar a desarrollar productos de alto nivel e innovadores, en más variedades, pero en menos cantidades”.

De esta manera, la fuerza de trabajo del “Equipo A” incorporó el Sistema de Producción de Toyota (TPS, siglas en inglés) que promueve el bajo inventario, óptima fabricación y la colaboración en investigación y desarrollo, así como la eliminación de desechos. En el presente, el “Equipo A” está formado por 23 miembros.

Wang, de Merida, dice que su compañía se benefició con la promoción de los principios de administración de producción, incluyendo la producción justo a tiempo, la administración de calidad total (TQM, siglas en inglés) y el mantenimiento de producción total (TPM, siglas en inglés). En general, estas medidas redujeron los costos de producción a lo largo de toda la cadena de suministro, y ahora permiten que los fabricantes taiwaneses ofrezcan bicicletas y componentes de alta calidad y precios competitivos.

“Redujimos de manera efectiva nuestro inventario de componentes en un 15 por ciento, el plazo de entrega en 60 por ciento, y elevamos la productividad en 25 por ciento, gracias a la implementación de TPS, TQM y TPM en 2003”, agrega.

La Empresa Lee Chi es una compañía doméstica que fabrica frenos, palancas de cambio y asientos de bicicleta. Es conocida por la marca PROMAX y también forma parte del “Equipo A”.

El plan total

“La introducción de TPS en nuestras líneas de ensamblaje cambió nuestra forma de trabajo y de entrenar a nuestros trabajadores para capacitarlos en la operación de diferentes tareas. Con la participación en las actividades organizadas por el ‘Equipo A’, aprendemos entre sí y juntos encontramos soluciones para los problemas”, dice Charles Chang, asistente especialista en Lee Chi. “Nuestra calidad de producto e índices de rendimiento mejoraron, y podemos ser más flexibles a la hora de satisfacer las necesidades de los clientes”.

Chang agrega que gracias a la informatización y automatización, así como la estandarización de los procedimientos de producción, el plazo de entrega del producto ahora es de 10 a 30 días, una reducción significativa porque anteriormente era más de 30 días.

Según Chang, la íntima interacción entre los ejecutivos de las compañías participantes del “Equipo A” redujo los conflictos de poder. Además, en la formulación de sus respectivas políticas corporativas, los ejecutivos pueden satisfacer las necesidades de la industria como un todo.

Sheu, de Giant, cree que la asociación contribuyó substancialmente a la transformación exitosa de la industria de las bicicletas de Taiwan. “El establecimiento del ‘Equipo A’ eliminó la teoría de que los vendedores sólo pueden competir, y no pueden cooperar entre sí”, dice.

Entre tanto, las tendencias mundiales han favorecido el desarrollo de la industria de las bicicletas y la mayoría de los fabricantes domésticos es optimista en cuanto al futuro.

“El ciclismo es cada vez más popular como actividad recreativa y las bicicletas son un medio de transporte ecológico”, dice Sheu. “Además, vemos enorme potencial en la demanda de bicicletas eléctricas en China, donde en muchas ciudades está prohibido el uso de motocicletas, así como en Europa, donde la conciencia medioambiental alcanza un nivel muy alto. Tenemos confianza en que si continuamos mejorando el diseño, la calidad y el servicio después de las ventas, podemos mantenernos en Taiwan y asegurar una sólida posición en el mercado internacional”.

Popular

Más reciente