La presidenta Tsai Ing-wen instó el 2 de agosto a los hijos de los nuevos inmigrantes que se sientan orgullosos de quienes son, ya que marcarán la diferencia en Taiwan.
“Deben estar orgullosos de ser los hijos de nuevos inmigrantes. Sus madres son muy sobresalientes”, dijo Tsai a los jóvenes en el transcurso de la ceremonia de entrega de los Premios Presidenciales para la Educación, donde 9 de los 56 homenajeados son hijos de nuevos inmigrantes.
“Veo un espíritu de perseverancia heredado en ustedes”, dijo Tsai. “Taiwan será definitivamente diferente gracias a los esfuerzos de vuestra generación”.
La Mandataria señaló que los estudiantes han recordado al Gobierno que debe ofrecer un apoyo más abarcador a las familias con necesidades especiales.
Tsai también manifestó que cree que cada estudiante posee un potencial infinito, y lo más importante es que el Gobierno ofrezca oportunidades para que los estudiantes obtengan una mejor auto-comprensión e identifiquen sus metas, realizándolas paso a paso.
Los galardonados con los Premios Presidenciales para la Educación podrán tener diferentes experiencias y trasfondos, pero todos ellos comparten una cualidad común: la fe para luchar por lo mejor, dijo Tsai.
No importa cuán severo sea el entorno o cuán difícil sea el desafío, los galardonados siempre han sido firmes, positivos, maduros y razonables, lo cual constituye la principal razón por la que han ganado los premios, señaló.
En su decimosexta edición, los premios reconocen el desempeño de los galardonados y motivan a los estudiantes a continuar sus esfuerzos, explicó Tsai.
La Presidenta dijo que estos jóvenes premiados encontrarán muchos reveses en su vida y habrá momentos en que podrán sentirse con deseos de abandonarlo todo; pero deben pensar que han sido distinguidos con los Premios Presidenciales para la Educación, y siempre deben pensar en su capacidad y poder de voluntad.
“Los fracasos nos enseñan cómo alcanzar el éxito, y la adversidad nos enseña cómo perseverar”, concluyó Tsai.