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Bahía Tapeng busca atraer a los turistas con su primer festival atlético oceánico

16/09/2003
Practicar el motociclismo acuático y el vuelo en parapentes fueron sólo dos de las múltiples actividades disponibles para los turistas en el carnaval de deportes acuáticos que se celebró en Bahía Tapeng hasta finales de agosto.
primer Festival Atlético Oceánico de la Bahía Tapeng se inició el 2 del mes pasado con enérgicas danzas y coloridas presentaciones, a las que siguió la original entrada del presidente Chen Shui-bian. Chen remó ceremoniosamente hasta la orilla en una balsa, como símbolo de que las festividades habían comenzado. Le siguieron cerca de cien balsas similares, botes de vela y aeroplanos, que protagonizaron un desfile en la Bahía Tapeng, para conmemorar la apertura de este evento de un mes de duración.

Este evento fue organizado por el Buró de Turismo, adscrito al Ministerio de Transportes y Comunicaciones; la Comisión de Educación Física y Deportes; y el Buró de Asuntos Culturales del distrito de Pintung. El festival desplegó diversas galerías de pescadores, deportes acuáticos, barcos de fin de siglo, y un espectáculo acuático. Otras actividades disponibles fueron botes de pesca virtuales, simuladores de navegación, guerra con bolas de pintura, espeleología, voleibol de playa, y veleros al estilo tradicional.

Situada en Tungkang, la bahía es un lugar turístico en ciernes. En 1997, se convirtió en el Area Panorámica Nacional de Bahía Tapeng. Según el alcalde del distrito de Pintung, Su Chia-chuan, develar el misterio de Bahía Tapeng implicó abrir al público una anteriormente prohibida base militar. Los japoneses construyeron una base aérea en esta laguna sin desembocadura en 1937. En ese momento, el gobierno colonial la llamó Tatan, que significa "gran lago". Este nombre fue una herencia de los días de la dinastía Ching (1644-1911). A la bahía se le dio un nuevo nombre tras la derrota de Japón en la Segunda Guerra Mundial, cuando la isla fue traspasada a los chinos, quienes construyeron una academia para la fuerza aérea en este lugar en 1949.

El festival, abierto hasta el 31 de agosto, invitó a los turistas a chapotear en el agua y a divertirse practicando una variedad de deportes acuáticos. La exposición contó con 50 hectáreas de terreno, mientras que para la práctica deportiva, el entretenimiento y la diversión para toda la familia se destinaron 500 hectáreas de área de la laguna. Entre los muchos edificios e instalaciones existentes, hay un restaurante único, en forma de hidroavión, casi del tamaño de un Boeing 747, que puede albergar a casi mil clientes y se encuentra de cara a un anfiteatro para danza acuática.

Bahía Tapeng busca atraer a los turistas con su primer festival atlético oceánico

Los artistas locales han contribuido con interesantes piezas para decorar y compartir la belleza de la bahía.

En las aguas de la bahía se colocaron varias obras de arte, grandes y decorativas, creadas por artistas de Pintung. También hay lanchas de choque, botes dragón, bicicletas para agua, canoas, botes de remo, y botes de vela. Además, los turistas pueden tomar una balsa para visitar la Isla Concha de Ostra.

Durante el viaje a la Isla Concha de Ostra, los guías profesionales cuentan historias locales acerca de cómo se formó la laguna en la bahía y de cómo es la vida de las familias que viven sobre el agua. Los turistas realizan un viaje tranquilo en balsa a lo largo del manglar, que se llena de vida con flores aromáticas cada verano, hasta que sus semillas caen en la tierra cenagosa a finales de agosto para germinar. Cangrejos, saltarines del fango y aves tales como las garcetas, los faisanes comunes y los aguzanieves grises lo llaman su hogar.

La Isla Concha de Ostra se formó en 1978 cuando se cerró la academia de la fuerza aérea y los militares comenzaron a alquilar Bahía Tapeng a los residentes. Las ostras eran tan abundantes que sus conchas se acumularon hasta formar una isla. Además de criar lisas, camarones, meros y langostinos, varios residentes en el área se ganan la vida operando restaurantes flotantes.

La literatura promocional para el festival presentó cinco "entradas" o "puertas" temáticas. La primera de ellas fue llamada "puerta turbulencia". Si su gusto se inclina más hacia los deportes acuáticos, tales como el baloncesto, el voleibol de playa, las canoas, los botes de remo y las motocicletas acuáticas, el festival es su lugar. Tanto las carreras con botes de vela como la gran variedad de espectáculos y actividades permiten a los visitantes probar algo de la emoción que se disfruta en agua salada.

La "puerta de la belleza" alberga una ópera que consiste por entero de los sonidos del agua. Está montada en una edificación llamada La Torre de Agua, mientras que otras actuaciones acuáticas se llevarán a cabo en el Teatro Nido de Pájaro. Muchos visitantes aman las apasionadas bandas latinas que se presentan con frecuencia en Kenting —un paraíso para los amantes del agua, localizado en el distrito de Pintung.

En la "puerta virtual" hay un buque atunero virtual, al igual que una pista oceánica y el bote de vela Nueva Era, el barco en el que Liu Ning-sheng logró la hazaña de ser el primer taiwanés que circunnavegó el mundo.

Una exhibición del estilo de vida marítimo muestra las herramientas usadas comúnmente por las personas que se ganan la vida gracias al mar. Si se desea un viaje único, hay botes enclavados en tierra para aquellos que no se atreven a salir al agua. Dos pequeños botes de madera descansan sobre el césped y, con la ayuda de maquinaria, son mecidos de un lado a otro para simular el movimiento del océano.

Bahía Tapeng busca atraer a los turistas con su primer festival atlético oceánico

La Isla Concha de Ostra es el resultado de años de acumulación de conchas pulverizadas. Las ostras son abundantes en la bahía y se han convertido en una parte favorita de la dieta local, al igual que en una mercadería muy preciada. (Fotos cortesía de Rita Fang)

La galería del pescador marino es un edificio con una entrada muy interesante. Los visitantes tienen que caminar a través de un largo corredor diseñado para asemejar la garganta de un pez, antes de entrar a un cuarto diseñado como el vientre de un pez. Este cuarto contiene información y exhibiciones relacionadas con el mundo submarino, tales como los tipos de peces y los arrecifes de coral. Afuera, cerca de la galería de los pescadores, hay un bote virtual, especialmente construido para simular virtualmente la exploración en alta mar. De esta forma, los visitantes pueden vivir la experiencia simulada de atrapar atunes virtuales.

El aprendizaje en grupo toma lugar en la "puerta de la experiencia", donde los participantes pueden estudiar todo tipo de naves. Aquellos que tengan una participación sobresaliente en el campamento de verano junto al mar pueden llevarse a casa un certificado de canotaje como premio.

En la "puerta de la memoria", los visitantes pueden desatar los secretos de Bahía Tapeng. A pesar de que algunos de los edificios e instalaciones han sido rediseñados con motivo del festival, otros permanecen igual que siempre para que el público pueda aprender acerca de la base militar, legado de la Segunda Guerra Mundial.

Túneles oscuros y angostos conducen a sitios de relevancia histórica, tales como unos portones de hierro marcados por los disparos de metralletas, cuartos para suicidios y una presentación de diapositivas en blanco y negro acerca de las crueldades de los japoneses.

Los organizadores del evento reconocen que Bahía Tapeng es una laguna tranquila con un gran potencial para convertirse en una viable atracción turística. Muchos esperan que en el futuro la bahía continúe desarrollándose como un sitio donde los visitantes puedan disfrutar de la recreación y los deportes en el agua. La meta es poder atraer a 600 mil turistas cada año.

Traducido del Taiwan Journal
Por Silvia Villalobos

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