Taiwan Today

La cerámica vidriada, un método de cerámica que se encuentra casi al borde de su extinción, fue revivida recientemente en la Galería Spring en donde Yang Feng-cheng expuso 30 de sus obras. Nativo de Yaoyuan, a los 14 años Yang fue aprendiz de un pintor de muebles. Esto le abrió el camino en este campo. Posteriormente se vio inspirado para desarrollar el arte tradicional, cuando un día visitó el Museo Nacional de Palacio, en donde quedó cautivado por las obras de laca de la dinastía Ming. Después de 13 años de investigación y de constante superación, revivió finalmente este arte para el público. En mayo del presente año, el Museo Nacional de Palacio lo invitó a exponer algunos de sus obras. La savia blanca para barniz, extraída de cierta clase de árboles, constituye el material natural para la cerámica barnizada, afirma Yang, debido a que al exponerse al aire se endurece y oscurece. Además de ser un experto en cerámica vidriada, suele combinar en sus obras la belleza de la escultura y la pintura, cuyos temas son los paisajes y edificios. Reviviendo un arte que tuvo su apogeo artístico durante las dinastías Tang, Sung y Yuan, Yang difiere de los demás artistas, en que crea sus obras moldeándolas en formas de recipientes, en un período entre tres a doce meses.