Un día la diosa Kuan Yin* se dio cuenta de lo dura que era la vida de los hombres, porque siempre estaban hambrientos. Su compasivo corazón se sintió conmovido, por lo que decidió ayudarlos. Una noche descendió en secreto hasta los campos y se exprimió el pecho con una mano hasta hacer que de él brotara leche, derramándose sobre las espigas de arroz. Apretó hasta que ya no le quedaba más leche, pero como aun no estaban vivas todas las espigas apretó su pecho exhausto una vez más con toda su fuerza, manando de él una mezcla de sangre y leche. Al completar su tarea, regresó satisfecha a los cielos.
Desde aquel día las espigas estuvieron llenas y el hombre tuvo arroz para comer. Los granos blancos fueron formados de leche, mientras que los rojizos por la mezcla de sangre y leche del seno de Kuan Yin.
*Kuan Yin es la diosa asociada con el nacimiento y la piedad. Se dice que fue una princesa hindú y una de las primeras y más devotas discípulas de Buda. Su verdadero nombre parece que fue Miao Shau. Forma parle de los Tres Grandes Seres: Manjusri, P'u Hsien y Kuan Yin.
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