El Museo de Arte de Filadelfia (PMOA, siglas en inglés), en Pensilvania, Estados Unidos, es una majestuosa e icónica obra de arquitectura clásica cuya imagen se ha vuelto familiar gracias al celuloide. ¿Quién puede olvidar la famosa escena de Rocky, quien levanta los brazos triunfalmente al culminar la escalinata que da al pórtico del Museo?
Más famosa aún es su espléndida colección de obras de arte, que abarca una serie de estilos, desde los impresionistas hasta el arte contemporáneo, pasando por los más conocidos artistas de todo el mundo. Desde originales de Vincent van Gogh y Auguste Rodin, cerámicas chinas, esculturas de y el Renacimiento, hasta tejidos de Guatemala y Perú o molas de Panamá, el impresionante ámbito de las colecciones del museo hace que sea una parada obligatoria de cualquier amante del arte.
Por lo tanto, los taiwaneses no han desperdiciado la oportunidad de ver una parte de tan rico acopio y se han hecho presentes en forma masiva en el Museo de Bellas Artes de Taipei (TFAM, siglas en inglés), donde fue inaugurada el 26 del mes pasado una exhibición con 58 obras maestras selectas de las colecciones del Museo de Arte de Filadelfia.
La muestra, titulada De Manet a Picasso: obras maestras del Museo de Arte de Filadelfia, incluye 53 pinturas al óleo y cinco esculturas de bronce, realizadas por 33 artistas. La exposición brinda una visión general del desarrollo y estilos del arte occidental, desde el impresionismo y post-impresionismo al avant-garde contemporáneo, con pinturas de artistas del siglo XX pertenecientes a escuelas fauvistas, cubistas, parisinas, modernistas y surrealistas. Las obras abarcan de 1961.
La mujer y los niños, de Pablo Picasso.
En particular, se hace hincapié en el impresionismo, de 1886, comenzando por Edouard Manet, Eugène Boudin, Edgar Degas, Claude-Oscar Monet, Pierre-Auguste Renoir y Camille Pissarro. Este movimiento artístico es muy apreciado por el público taiwanés, que ha tenido recientemente la oportunidad de disfrutar de varias exhibiciones de obras de artistas de dicho período. Otras obras importantes incluyen artistas post-impresionistas, tales Paul Cézanne, Paul Gaugin, Vincent van Gogh y Henri Rousseau. También cuentan con obras de artistas modernos estadounidenses Mary Stevenson Cassatt, Marsden Hartley y Georgia O’Keeffe.
“Esta es la primera vez que un museo estadounidense colabora con uno de para realizar una exhibición internacional de arte”, señaló el subdirector del TFAM, Chen Wen-lin, en una conferencia de prensa previa a la inauguración evento.
“La exhibición ofrece una gran oportunidad para que el público comprenda el desarrollo de la pintura en los últimos 200 años. Con obras cuidadosamente escogidas de la colección de 225.000 piezas del PMOA, los visitantes pueden disfrutar las obras maestras de las escuelas realistas, impresionistas y modernistas”, explicó Chen.
Durante la conferencia de prensa, se presentaron cinco pinturas destacadas a los medios: Retrato de Emile Ambre Carmen (1880) por Edouard Manet; La clase de ballet (1880) de Edgar Degas; Retrato de Mademoiselle Legrand (1875) por Pierre-Auguste Renoir; La odalisca amarilla (1937) de Henri Matisse y La mujer y los niños (1961) por Pablo Ruiz Picasso.
Las primeras tres pinturas mencionadas son consideradas los mejores ejemplos representativos de la pintura realista, mostrando fielmente vívidos retratos de los miembros de la alta sociedad, tales la diva amante secreta rey, un grupo de bailarinas o la hija de una familia burguesa parisina.
La pieza de Matisse presenta colores contrastantes en un ambiente exótico.
Por último, la pintura de Picasso muestra a los miembros de su familia: Paloma, su hija de una relación anterior; y Jacqueline Roque, su segunda esposa, acompañada de su hija Cathy de un matrimonio anterior.
“Vale la pena disfrutar de estas obras maestras eternas y diversas”, opinó el fundador y presidente de Franz Collection Inc., Francis Chen. “Espero que al mostrar estas pinturas en , los artistas locales se sientan inspirados a crear más arte”, afirmó Chen. Franz Collection Inc., compañía taiwanesa con sede en , Estados Unidos, especializada en cerámica fina para vajillas y joyería, es uno de los patrocinadores de la exhibición.
La eterna primavera, de Auguste Rodin.
La exposición es copatrocinada por TFAM, PMOA, Franz Collection Inc.; y con apoyo del Consejo para los Asuntos Culturales, el Gobierno de de Taipei y el Departamento de Asuntos Culturales de de Taipei. La muestra estará abierta al público hasta el 26 de septiembre de este año.
Fundado en 1876, el PMOA es uno de los museos más grandes en el mundo, y uno de los tres más grandes de Estados Unidos. El museo abarca un área de más de diez hectáreas y cuenta con 200 salones.
La actual exhibición en el TFAM cuenta con una iluminación clara. Las paredes están pintadas de un sobrio marrón claro. A la entrada, se presentan los nombres de los 33 artistas destacados.
Cada una de las esculturas ocupa su propio salón. De ellas, La eterna primavera, de Rodin, que presenta el abrazo de dos apasionados amantes, cuenta con más seguidores. Cabe destacar que la mayoría de los visitantes de esta obra, coincidencia, son parejas de enamorados.
A la entrada, recibe al público La mujer frotándose la espalda con una esponja, Torso. Esta obra de Degas es significativa porque denota un estudio de un movimiento de la vida diaria, no algo épico o sobrenatural se presume de una obra tal. No obstante, su realismo y la atención a la definición muscular deja entrever la habilidad artista y su cuidadoso apego a los detalles.
El público taiwanés ha acudido a la cita atraído por la fama de las obras maestras del PMOA. (Foto de Silvia Villalobos)
En el primer salón, los taiwaneses se congregan ante dos obras en particular, que gozan de gran favor público local. La primera de ellas, El retrato de Mademoiselle Legrand, de Renoir, genera sentimientos de ternura por su gesto dulce e inocente. La segunda, La clase de ballet, de Degas, es un clásico apreciado por conocedores y novatos.
El siguiente salón está dedicado a las mujeres. Retratos femeninos de diversas épocas comparten el espacio y compiten por la atención de la multitud. Aquí destaca Ojos azules (Retrato de Madame Jeanne Hébuterne), de Amedeo Modigliani, que presenta una mujer de cabello oscuro, de cara larga y rasgos estilizados, con su original nariz en cuña. Modigliani es famoso por sus representaciones de mujeres en tonos melancólicos.
Uno de los salones ha sido dedicado completamente a los paisajes, con vistas dignas de sueños, como Manne-Porte, Etretat, de Claude Monet, que captura una impresionante formación rocosa; o Mañana en Antibes, del mismo artista, con los tonos dorados de un amanecer reflejados en las hojas del árbol central y poniendo en llamas a la ciudad de fondo.
El primer fin de semana tras la inauguración evento, más de cinco mil visitantes acudieron al museo; o sea, casi el triple de lo usual. Los organizadores de la exposición de obras maestras del PMOA toman ésto un augurio éxito que se puede esperar de este importante evento artístico.