La Compañía de Artes y Porcelana Chinas, fundada en 1958 por el Sr. K. C. Jen. se especializa en producir las imitaciones de las porcelanas clásicas chinas. Ha dedicado más de 20 años al renacimiento de la cultura china, promoviendo al mismo tiempo. el entendimiento internacional a través de intercambios culturales. El Sr. Jen cree que con las experiencias acumuladas y los esfuerzos investigativos puede conseguirse una meta ideal: un mundo más civilizado y más armónico. Y esta nota es claro ejemplo de lo que puede la voluntad y el esfuerzo. Jen ha hecho y está haciendo todo lo posible para mejorar las relaciones públicas con todos los países, sobre todo los latinoamericanos. El mismo ha expresado que si el gobierno hace 10 puntos, el tiene que hacer 12 dentro del programa para fortalcer las relaciones amistosas de la República de China, ya que su compañía se ha convertido en un lugar turístico "obligado" de Taiwan. En su reciente viaje a China Libre -valga el caso- el Presidente Rodrigo Carazo insistió en conocer esta fábrica "de la que ya se me había hablado", según dijo. Cada año miles de viajeros de todos los rincones del mundo visitan la fábrica para apreciar las cerámicas raras y espléndidas que conforman una magnífica exhibición.
En vista de que a muchos extranjeros les interesa el arte de producir cerámicas y porcelanas, entonces Jen ha organizado unos cursos de entrenamiento para los interesados. Durante los años pasados, ha tenido un gran número de alumnos procedentes de colombia, Chile, Panamá, etc. También algunos extranjeros aprovechan las vacaciones de verano para aprender este tradicional arte chino. Después de regresar a su país, varios de ellos han llegado a ser profesores o a montar sus propias fábricas.
Un proceso difícil
La evolución de la empresa china ha sido un proceso largo y amargo. Ha experimentado innumerables reveses y fracasos durante las décadas pasadas. De las respuestas formuladas por K. C. Jen, podemos percibir las dificultades y obstáculos que ha encontrado a lo largo del establecimiento de la empresa.
"En los días duros –comenta-, no dormía en la cama, ni comía en la mesa, ni tomaba el agua con vaso (tomaba el agua de un pozo con las manos). Nunca he dejado de trabajar, día tras día, noche tras noche, sin saber cuando era día y cuando era noche. Ahora. recordando esa época, no se cómo lo pasé. Parece increíble, es como si fuera una pesadilla."
"Luego -añade- "tuve grandes apuros económicos, y una noche, la del 7 de septiembre de 1963, la oficina meteorológica anunció la llegada de un tifón fuerte, lo cual me hizo recordar de inmediato otro tifón, el Pomila, que destruyó mi fábrica en Siolan en 1961 y me obligó a trasladar la de Siolan a Yingo y luego a Peitou; pero luego de haber trabajado sólo cuatro meses, me atacó cruelmente otro tifón llamado Obor que me arruinó casi por completo de nuevo. Ahora iba a llegar otro para destruir la recién recuperada fábrica; me desesperé y me dije: ¿Por qué Dios me trata así? ¿Por qué me pone tantos obstáculos y desgracias una y otra vez? Sin darme cuenta, di un golpe fuerte en la mesa de herramientas haciéndome mucho daño. Miré atontado mis manos sangrientas y me calmé. Entonces pensé: si el cielo quiere ofrecer un cargo destacado a una persona, de antemano fatiga su cuerpo y hace sufrir su corazón."
"En realidad -explica- durante toda mi vida, ha existido una fuerza inexplicable que me sostiene y que me mantiene firme y valiente para enfrentarme a todos los problemas y resolverlos después con sabiduría y voluntad".
Y luego expone su mensaje a los jóvenes artistas: "para hacer cualquier cosa, lo más importante es la confianza, una vez perdida la confianza, se deshace el espíritu de lucha y se acabó todo; puesto que de la confianza sale la persistencia y ésta sostiene la constancia, estoy convencido del proverbio que dice ayúdate que dios te ayudará."
Este mensaje es el clave del éxito de Jen. Su experiencia de comenzar una carrera nueva tras superar tantas dificultades sirve como un buen ejemplo para los principiantes.
De ahí que no sea raro que Jen cuente con innúmerables amigos y que sus obras de- cerámica, porcelana y pintura sean famosas ya en todo el mundo. Es un hombre que se ha hecho a pulso, dentro del difícil y controvertido mundo del arte. Y eso bien vale la pena.