08/05/2024

Taiwan Today

Taiwán Hoy

NUDOS ANTIGUOS, TRUCOS MODERNOS

01/03/2010

Una pareja de esposos emplea el arte del macramé para transformar antigüedades en accesorios prácticos.

El pasado agosto, Li Shao-ming y Yin Yu realizaron una exhibición en el Museo Nacional de Historia. Las aproximadamente 170 antigüedades hechas de jade, metal, marfil y diancui –una técnica que utiliza capas de metal y plumas de martín pescador– eran fascinantes. Sin embargo, el centro de la exhibición no giraba en las antigüedades en sí, sino en la armoniosa combinación con diseños de macramé. “El resultado de la combinación es que estos artefactos antiguos han adquirido una nueva vida donde lo tradicional y lo moderno coexisten”, comenta Huang Yung-chuan, director del museo. “Los diseñadores han convertido piezas que eran simples artículos de colección en antigüedades prácticas, que pueden usarse y coleccionarse”.

El equipo de esposos  se ha dedicado a este arte por casi 20 años, pero la exhibición de agosto fue su primera muestra individual. “Entramos en el mundo de las antigüedades y el macramé, y lo hemos disfrutado sólo nosotros durante bastante tiempo”, dice Yin. “Parece que ahora es un buen momento para compartilo”.

Hace dos décadas, tanto Li como Yin trabajaban para el Departamento de Transporte del Gobierno de la Ciudad de Taipei. Yin, pasaba la mayor parte del tiempo libre en la tienda de antigüedades de su madre en el Mercado de Jade Guanghua en Taipei. La competencia era dura entre la docena de mayoristas y detallistas que vendían mercancías similares en el pequeño mercado de jade. A fin de promover el negocio, algunos vendedores tuvieron la idea de usar macramé básico para crear “valor agregado” a sus artículos. Cuando un cliente compraba una pieza de jade, pendiente u otro artículo, el vendedor le agregaba un cordón con algunos nudos decorativos para que pudiera colgarse alrededor del cuello o usarse como pulsera o colgarse en la correa. La madre de Yin, como también quería mantener la competitividad de su tienda, le pidió a Yin si la podía ayudar con los cordones. “En realidad, no tenía idea de macramé ni estaba interesada en ello”, recuerda Yin. “Pero parecía bastante simple y pensé que podía hacer el intento”.

De hecho, el macramé chino no es difícil de amarrar o tejer. Existen solamente alrededor de doce nudos básicos, cada uno con un nombre y significado especial. Por ejemplo, el nudo shou, se asemeja al carácter chino para longevidad, y un nudo panchang hace que parezca que el cordón tenga lazos infinitos, simbolizando la inmortalidad. Yin siguió las instrucciones de un libro sobre macramé chino, y muy pronto aprendió las útiles técnicas que podía usar en la mercancía de su madre. Si ayudó o cuánto ayudó al negocio cuesta mucho decirlo, pero ese servicio –generalmente gratis como “valor agregado”– pronto se convirtió en un estándar para cualquier vendedor detallista o mayorista. Como la madre de Yin es tanto mayorista como minorista, siempre había cientos de piezas a la espera de un cordón en la tienda. Aunque no es difícil, hacer nudos es una labor que requiere de tiempo. Pronto, Yin se dio cuenta que la carga de trabajo en la tienda de su madre requería más que unas cuantas horas después del trabajo, y entonces, renunció a su trabajo para dedicarse a tiempo completo a la tienda de su madre. Sin embargo, aún así el tiempo no era suficiente y Yin pidió ayuda a Li. Al igual que su esposa, Li comenzó a dedicarle horas después de su trabajo para ayudar en la tienda, y finalmente, también dejó su trabajo para hacer macramé a tiempo completo.

 

Admiración
Jade, metal, alambre
31 x 15 cm

El macramé se ha utilizado para muchas cosas a través del tiempo, tanto para usos prácticos como decorativos, alrededor del mundo durante siglos. Dejar un trabajo en el Gobierno para una carrera de este tipo, pareciera que no tiene mucho sentido, especialmente cuando atar nudo tras nudo, día tras día, suena exactamente como uno de esos trabajos aburridos que la gente detesta y se cansa. Sin embargo, lo interesante del asunto es que cuantos más nudos la pareja ataba, más “se ataban” a este arte. “Es muy divertido por las numerosas variaciones que pueden hacerse con la combinación de nudos básicos”, dice Li. “Además, hay el sentido de logro cuando se termina un diseño que puede hacer que una antigua pieza de joyería sea apreciada desde otro ángulo”. Aunque su trabajo diario ayudaba el negocio de la madre de Yin, la pareja estableció el Estudio de Diseño Ming & Yu para crear sus propias piezas en su tiempo libre. La diferencia entre una pieza de  “producción” y una pieza de estudio es que la primera generalmente sólo lleva unos cuantos nudos decorativos, mientras que la segunda es mucho más complicada. Puede ser una combinación de varias piezas de diferentes materiales, o puede ser la “recuperación” de una pieza rota. Por ejemplo, en una pieza que terminaron recientemente, una parte rota de un brazalete de jade se transformó en un collar al “ocultar” los dos extremos del jade debajo de nudos diseñados con elegancia.

Cada pieza es única

La combinación de varias piezas de antigüedades y usar nudos complicados son innovaciones para el mercado de antigüedades, así como de la comunidad de macramé chino, por eso Li e Yin han trabajado prácticamente por su cuenta desde el comienzo, porque hay poco material de referencia excepto los de técnicas básicas de macramé.  “El reto en este tipo de trabajo de diseño es que cada antigüedad es única, y cada combinación es algo que nunca se ha hecho antes, por eso hay que idear algo nuevo para cada pieza”, dice Yin. Para ejecutar sus diseños, Li e Yin han combinado macramé chino tradicional con el occidental, y también incorporan técnicas nuevas desarrolladas por ellos. Para armonizar con los colores de antigüedades hechas de diversos materiales, ellos tienen sus cordones de seda y nylon teñidos a su gusto– la mezcla no se destiñe tan rápidamente y funciona mejor que los cordones de pura seda.

La mayor parte del tiempo, la pareja trabaja estrechamente como un equipo. Li dice que su esposa es buena en el diseño para que los diferentes artículos formen un todo perfecto, él es bueno para las técnicas de nudos y entrelazar las piezas. Sin embargo, ambos tienen ocasionalmente opiniones diferentes. Yin dice que ella es una persona más “tradicional” que prefiere diseños simétricos y colores tradicionales; en cambio, Li es más atrevido tanto en el diseño como en la elección de colores. No obstante, los desacuerdos pueden resolverse fácilmente. “Una de las ventajas del macramé es que los nudos se pueden desatar y atar sin inconvenientes”, dice Yin.

 

Cáliz verde
Jade verde
32 x 17 cm

Hace alrededor de 10 años, trasladaron su estudio más cerca del Mercado de Jade Jianguo de Taipei. Como dedican la mayor parte de su tiempo al diseño y macramé, Li e Yin no tienen mucho tiempo para administrar el negocio. Por ejemplo, algo que les incomoda del negocio es colocar los precios a sus diseños. Yin explica que en el mercado de antigüedades, los compradores y vendedores pueden colocar una escala de precios a la que están dispuestos a comprar o vender, basado en la calidad, antigüedad y condición de la pieza. Pero no existe esta escala de precios para antigüedades combinadas con diseños de macramé, especialmente cuando el servicio era originalmente “valor agregado” que venía incluido con la antigüedad.

La pareja tampoco es buena en la promoción, y la única publicidad para su estudio ha sido la recomendación de un cliente a otro, que ha producido suficiente para pagar las cuentas de cada mes. Pero esto no parece preocuparlos. “Hemos encontrado mucha felicidad y satisfacción en las antigüedades y el macramé, y hay mucho diseños en nuestras mentes esperando a ser ejecutados”, dice Yin. ¿Qué más se puede pedir? Mientras que la pareja se centra en crear nuevas piezas, sus compradores regulares están entusiasmados con la promoción del arte, lo que ya ha producido resultados.

Por ejemplo un cliente regular que vive en Estados Unidos, se ofreció a ayudarlos a probar suerte en el mercado estadounidense y logró firmar los derechos exclusivos para llevar sus diseños a Estados Unidos con la AsiaStore en la Sociedad Asia y el Museo del Centro Rockefeller de Nueva York. AsiaStore, que muestra las obras creativas de artesanos asiáticos y asiático-americanos, es una de las principales tiendas de museo en Estados Unidos. En los últimos cinco años, las ventas de sus diseños han sido continuas. Para Yin y Li, algo que los estimula más que las ventas, es que son reconocidos como diseñadores y no como anticuarios. “El significado cultural del patrón sobre un pendiente de plata o la antigüedad de una pieza de jade de la Dinastía Ming no le importa tanto a los extranjeros como a los chinos”, dice Yin. “Ellos compran los diseños, no las antigüedades”.

A través de los elogios de la gente, Li e Yin han logrado localmente también buena reputación. Por ejemplo, a un ex embajador le gustaba comprar sus piezas como regalos diplomáticos oficiales. Por otra parte, junto a la fama, ha aparecido una legión de imitadores. “El macramé no es nada del otro mundo, por eso la gente puede aprender fácilmente la técnica viendo un diseño o una foto”, dice Yin. “No pueden copiar la idea que inspiró el diseño, pero a los compradores promedio no les importa eso”. Además de los imitadores locales cuyo “procedimiento de operaciones estándar” es duplicar los diseños y enviarlos a lugares con mano de obra barata para la producción en masa, la pareja ha encontrado que sus diseños están siendo usados por compañías extranjeras. Cuando Yin vio el catálogo del 2008 de una famosa marca de bolsos, descubrió que un nudo único que había creado y que tiene usando más de una década estaba en todos sus bolsos. “En cuanto a que nos copie una marca internacional, no sé si debemos sentirnos halagados, orgullosos, enojados o qué”, dice Yin. La pareja ha comenzado recientemente a patentar sus diseños, aunque saben que eso no ayudará mucho.

Con el paso de los años, Yin y Li han creado más de 10.000 piezas. Se requieren varias horas para terminar algunos diseños, mientras que otros toman días. Al haberse sumergido en el mundo del macramé durante dos décadas, la pareja ha pensado recientemente en disminuir su carga de trabajo por razones de salud, porque las arduas horas de trabajo han debilitado su visión; a Yin le han causado problemas de la columna, y a Li, de los hombros. “Pero no tenemos conocimientos de computación, no vamos al cine y no viajamos. ¿Cómo vamos a pasar el tiempo si disminuimos nuestra carga de trabajo? pregunta Yin. Entonces, casi todas las noches, su taller continúa iluminado hasta altas horas, dándole vida a piezas antiguas de jade, metal y marfil con nuevos diseños de macramé.

Popular

Más reciente