29/04/2024

Taiwan Today

Taiwán Hoy

El Primo Lee creación del caricaturista político Ranan R. Lurie

01/01/1986
Quizás la respuesta más completa a la pregunta "¿Quién soy yo?", podría ser contestada por medio de una caricatura de quien se hace la pregunta. Sin embargo, los habitantes de la República de China no encontraron nunca la respuesta hasta que se las ofreció Ranan R. Lurie, reconocido caricaturista judío-norteamericano, en sus esfuerzos por crear una poderosa imagen internacional para los chinos modernos. La nueva imagen de Lurie es "el Primo Lee", un personaje ágil y juvenil que hizo su primera aparición pública en una pose de artes marciales, llevando sobre el pecho la bandera de la República de China, al lado derecho de su traje de kung-fu. Su pose agresiva está acompañada por una cabeza dominante, constrastando con sus gestos faciales, que Lurie espera habrán de transmitir las características, mezcla de resolución y simpatía que le han impresionado del pueblo chino. Chen Ho, reportero del diario chino China Times, declaró: "me gustan sus dominantes características faciales: mandíbulas, cejas y ojos expresivos, pero no su nariz, su semi-sonrisa y sus oreja en forma de abanico; considero que los labios gruesos y sensuales le agregan arrogancia a su expresión". Lurie, quien afirma que depende de tales reacciones para juzgar el valor de sus obras como arte, podría sentirse satisfecho con lo que ha hecho del Primo Lee: antes de su desvelamiento en el Museo de Bellas Artes por Shen Chang-huan, Secretario General del Presidente el 12 de diciembre, Lurie le había dicho a la prensa que esperaba que a la mayoría de personas les gustaría el Primo Lee, pero que sería la crítica adversa del 10 al 15 por ciento la que podría confirmar realmente la identidad de la caricatura. En 1977 el reconocido caricaturista visitó por primera vez la República de China. Sus primeras impresiones acerca del pueblo chino fueron cual lejano pregón, un estereotipo a largo plazo de la distorsionada imagen de propaganda que fuera diseminada por parte de los enemigos del pueblo. Lo que lo dejó aún más sorprendido fue la sociedal moderna y llena de vitalidad que encontró, con personas que parecían "muy europeas o norteamericanas" . La carrera de caricaturista de Lurie tuvo como base los 22 añas de reportes y ediciones (acompañados siempre de caricaturas); especializándose después en su selección natural, trabajó en Estados Unidos y en otras partes del mundo, incluyendo el diario alemán Die Welt, el London Times y el Asahi Shimbun el principal diario japonés, como analista/caricaturista político. Durante sus viajes de trabajo efectuados, realizó también amplios contactos con el mundo periodístico y político, los que le facilitaron acceso a noticias confidenciales. A través de los periódicos, sus caricaturas aparecen actualmente en 57 países, sellando el sexto año de éxitos consecutivos en su identificación en el Guineess Book of World Records (Libro de Récords Mundiales) como el caricaturista político más conocido mundialmente, con un total de lectores de 62 millones. A la edad de 53 años, Lurie es también director- jefe de edición del Servicio Editorial de Prensa, por lo que tiene mucha influencia en la difusión de artículos orientados internacionalmente por parte de analistas norteamericanos. Esto, además de su trabajo regular en sus caricaturas políticas y en el desarrollo de un nuevo servicio de caricaturas para la televisión. En una entrevista, Lurie explicó en detalle su método de trabajo: podría llamar a un ministro en Londres, un reportero en Turquía, o sea a personas a través de todo el mundo que han trabajado con él y en quienes ha confiado para obtener información fidedigna. Su meta como caricaturista/político es definir correctamente el resultado de una determinada situación y es en base a esas predicciones como recibe el estímulo que necesita para su trabajo. En cuanto a las reacciones, hizo notar que recibe muchas cartas "correspondencia tanto de parte de sus simpatizantes como de quienes no lo son -mientras mejor es la caricatura, mayor es el número de correspondencia de los que están en desacuerdo". Agregó que se ha ganado fuerte odio y animadversación por parte de los comunistas, "porque considero que ninguna sociedad necesita poner a una gran parte de sus ciudadanos en campos de concentración". De los numerosos dirigentes políticos que ha entrevistado, mencionó algo que le ha impresionado particularmente: "el Presidente Sadat...es un hombre muy sincero e inteligente" y "el Presidente Reagan... al contrario de los rumores (de Wáshington), es un líder muy inteligente". Lurie visualiza el balance de guerra y de paz en la actual situación mundial como el dibujo de un mundo partido en dos partes, unidas por medio de un broche que lleva escritas las palabras "buena voluntad". Describió sus expectativas fundamentales como optimistas, "la paz mundial que sigue a las guerras pequeñas y convencionales". En cuanto al papel del Primo Lee en todo esto, Lurie explicó que el mismo nació de la misma necesidad de identificación al contemplar a "Tarosan", la caricatura moderna representativa del Japón, creada también por él en 1983 y de tener una imagen política caricaturizada, como la del Tío Sam, establecida hace 200 años, o la de John Bull, caracterización histórica de Gran Bretaña en el extranjero desde hace 300 años o la del oso ruso. Lurie estaba consciente que los chinos tenían problemas de identidad internacional por parte de los caricaturistas políticos, por lo que durante su visita a la República de China efectuada el año pasado, empezó a unir las piezas para desarrollar la idea que posteriormente se convertiría en el Primo Lee. Escogió el nombre "Lee", puesto que es fácil de pronunciar y recordar en idioma inglés; sin embargo el retrato en sí, fue más cuidadoso, resultado de entrevistas y bosquejos de lo que habían hecho 200 representantes chinos de todos los estratos de la sociedad: pescadores, agricultores, comerciantes, administradores y militares, todos ellos contribuyeron con su ayuda. Durante dicha visita, Lurie viajó por toda la isla, visitando también la isla de Kinmen, para observar el continente controlado por los comunistas. Siendo sensible a la especulación de por qué tenía que ser él quien había de crear la imagen internacional para los japoneses o para los chinos, Lurie respondió diciendo que el mismo Tío Sam fue creado por una persona que no era norteamericana. Los problemas con las imágenes creadas localmente pueden observarse en los resultado de un concurso patrocinado por el diario en chino United Daily News en septiembre del año pasado, para conseguir una figura que representara a la República de China. Los dos primeros lugares presentaron dos personajes que eran innatamente locales en cuanto a su apariencia. El más tradicional era un personaje de mediana edad, practicando kung-fu, que llevaba puesta unas pijama; la otra era del tipo de una estrella de cine, vestido formalmente, siempre en pose de kung-fu. Ninguno de ellos podía participar en la escena internacional. El desvelamiento del Primo Lee causó mucha incredulidad dentro del pueblo chino así como de las personas que tienen que ver con su propia imagen. La mayoría de discusiones de los medios de prensa se enfocaron en las imágenes tradicionales. Un buen ejemplo es la página completa publicada en el United Daily News bajo el titular "¿A quién se parecen los chinos?" que fue respondida por prominentes escritores. Invariablemente, cayeron en anécdotas históricas; luego dibujaron caracteres típicos de la época de apogeo de los logros culturales chinos. Cuando a Lurie se le preguntó específicamente acerca de lo que los caricaturistas chinos podría publicar en el exterior, ofreció algunos consejos prácticos acerca de enviar tantas obras de calidad como fuese posible. Previno específicamente que los artistas deben presentar imágenes que cautiven a la audiencia internacional: que no solamente se parezcan físicamente a las personas, sino que expresen también rasgos especiales de carácter; no solamente las cualidades mentales, sino que también el potencial mental. El Primo Lee -continuó- expresa directamente sueños y ambiciones reales, siendo esas sus características dominantes. Está situado globalmente en circunstancias de confrontación ... y dispuesto a enfrentarlas. "No existe ningún juego con el Primo Lee; permite conocer exactamente la localización geográfica. Después de pasar años en Inglaterra, Alemania y Japón, en Taiwan encontró este atributo como la figura distintiva del carácter chino", agregó. Lurie propone que "Primo Lee represente al pueblo chino, en Malasia, Singapur, el continente chino y aún en San Francisco... por sobre todo, él es chino, como una antorcha en la oscuridad, -agregando- que fue creado principalmente en la República de China y lleva su bandera". Refiriéndose a las diferencias entre el Primo Lee y el Tarosan, indicó que por reflejar cosas diferentes, Lee es más robusto y vivaz. "El Primo Lee tiene que realizar importantes misiones inmediatamente. Japón no es objeto de oposiciones directas y hostiles como la República de China... Debido a que el Primo Lee está relacionado con la sobrevivencia económica y militar, es más decidido, audaz y enérgico que el Tarosan. El Tarosan es más fácil de manipular". El Tarosan ha llegado a convertirse en una imagen internacional dentro de las caricaturas internacionales y es de suponerse que el Primo Lee habrá de seguir el mismo camino. Los chinos que tienen dudas acerca de él y de sus orígenes -dibujado por una persona occidental- probablemente tendrán que aceptarlo tal como es. Personalmente soy de la misma opinión de Chen Ho y del grupo que tiene sus reservas acerca del Primo Lee. Quizás, esta es una imagen más bien de la República de China en Taiwan, que del pueblo chino de toda la región del pacífico que Lurie hubiera esperado presentar. De cualquier forma, sus futuras presentaciones serán seguidas con interés cada vez más intenso. □

Popular

Más reciente