05/05/2024

Taiwan Today

Taiwán Hoy

Incluyendo al espectador en la definición del arte

01/07/1985
Con la mirada de preocupación, característica de quien ha escogido un estilo de vida bastante diferente del de un típico padre de cualquier familia citadina, Chuang Pu, además de compartir el nivel de vida del ciudadano común de Taipei, comparte también las perspectivas de un futuro inseguro e incierto. Sin embargo, un sentido de realización personal y una potente fuerza subconciente lo empujan hacia un rumbo establecido desde hace mucho tiempo para ofrecerle una satisfacción interior. Chuang Pu es una destacada figura en el mundo del arte chino moderno, una muestra del cual, que constituye su propio sentido de ese mundo, lo ha dejado colgado en el espacio: "No puedo considerar mis obras como arte chino o arte occidental, simplemente constituyen arte por sí mismo." Sin embargo, es un pintor abstracto que sigue el estilo de Josef Albers, famoso por su serie del Homenaje al cuadrado (1964). Sin embargo, las obras de Chuang no tiene nada de la definición matemática ilustrada por los ejemplos de Albers y en sus antecedentes, inclinándose más hacia las abstracciones post-pintorescas. A Chuang le resulta muy difícil explicar o definir su arte; siempre le hace falta la terminología para ese momento tan especial como lo constituye la contemplación de una obra. Por lo general trata de eludir el término "abstracto"; para él son completamente tangibles la línea y el color, que dan realce a la estructura pictórica de una obra. Ve una obra como un hecho ya establecido ante el espectador, pero como un hecho que depende no solamente de sus propios colores y líneas, sino que también del espectador. Chuang se impacienta cuando los espectadores luchan con los efectos ópticos que fuerzan algunos ajustes visuales, así como cuando le preguntan acerca de lo que quiere decir con alguna obra en particular: "¿Conlleva algún mensaje?" -Por toda respuesta, él a su vez pregunta: "¿Qué es lo que sientes? ¿Qué es lo que ves?" Veo, respondí, la forma básica: el cuadrado creando la forma esencial en la mayoría de sus pinturas. Cuadrados inmensos: vastos espacios y fondos divididos en cuadrados que no solamente combinan la textura de sus lienzos sino también proclaman definitivamente el dominio del cuadrado sobre sí mismo. En los últimos años, sobre todo, en su reciente exposición en la Galería Spring de Taipei, ha sido esta la característica manifiesta de sus poderosas obras. Para lograr dicho efecto -el fondo reforzando una composición absoluta­ Chuang y su dedicada asistente Maricarmen, (su esposa), trabajan incansablemente sobre metros y metros de lienzos con un sello (el sello chino para la firma del nombre), haciendo cuadrados regulares de un centímetro sobre la pieza entera. El resultado es luego modificado en lienzos específicos por tratos individuales de cuadrados más pequeños: una variación de técnicas logradas con pincel, cuchilla, etc., para conseguir los diferentes efectos en detalle y la inflexión interna del fondo. Antes de su última exposición, Chuang no hacia uso físico de una tercera dimensión, excepto para decorar o contrastar lo obtenido del material secundario: alambre o tela aplicada para crear una superficie de stereo-textura, una implicada afirmación de escultura. Su reciente exposición anunció también una nueva fase en su desarrollo, en obras que toman la forma de uno de los aspectos de la escultura. Empezando físicamente con el espacio de la sala, subordina una estructura deducida para un espacio físico, reduciendo de alguna manera la calidad de escultura implicada en la corriente anterior del artista. Sin embargo, los productos de esta nueva fase no pueden encajar con ese equilibrio bastante discernible, que constituye la saliente realización de la antigua corriente. Sin embargo, las nuevas creaciones de esta misma exposición, en relación a la fase de desarrollo anterior, evidencia ciertamente el acercamiento a la perfección del artista, la delicadeza de un creador en las últimas etapas de su desarrollo dentro de un género familiar. A través de varias exposiciones, este sentido de desarrollo fue ejemplificado particularmente con ejemplos en la incorporación de una atrevida declaración en la forma de una línea recta oblicua, formando contraste con el color y el fondo del gran cuadrado. En un lienzo, esto fue alcanzado por medio de una larga vara de bambú; en otros, la mezcla de barras de metal crearon un impacto dramático. La colocación alterna de estos acentos en las diferentes composiciones producen efectos pictóricos por demás únicos, demostrando posteriormente el vigoroso desarrollo dentro de la corriente anterior. El crítico de arte, Lu Ching-fu, se refirió a las obras de Chuang por medio del siguiente comentario: "Aunque está considerado como un artista de vanguardia, Chuang no se limita en sus obras a los sujetos, formas y estilos favoritos de muchos de sus contemporáneos. Sus obras podrían ser monótonas y su mensaje ambiguo, pero dan a conocer la libertad de sus ideas." Con esta última exposición, difícilmente podría catalogarse a Chuang de monótono. En cuanto a "ambigüedad", prefiere considerar sus mensajes como "ilusionarios". Para él, más que llegar a convertirse en verbalmente elaborado, ha continuado con la forma del "arte ilusionario" y una parte consciente de su propósito. Si existe una ilusión, cada uno es libre de escoger entonces su propia interpretación. Por ejemplo, yo vi el dominio del cuadrado; otro observador, absorbido por la textura del todo, percibió el mensaje como "algo similar al bordado". Obviamente, no existe una unidad instantánea de percepción. En eso consiste el talento sobresaliente de Chuang: en destacar la composición y expresión en líneas, formas y matices; para ofrecerle a un espectador la ilusión del bordado y a otro, la ilusión de planos que se sobresalen, definiéndose clara y libremente de sus límites físicos en los lienzos; para ambos, la satisfacción experimentada al observarlos es lo que los convierte en arte. Los primeros pasos artísticos de Chuang fueron opacos y sin dirección alguna; su primer adiestramiento artístico se limitó a las ofertas de la Escuela Artística y Comercial Fu-hsing de Taipei. Sin embargo, posteriormente se dirigió en búsqueda de adiestramiento formal al Instituto de Arte de la Universidad de Madrid, durante cinco años. No fue sino hasta que estuvo allí, cuando empezó a experimentar por primera vez su género actual. En ese entonces, vio a Madrid como un ambiente que no aceptaba realmente este arte particular. Se dio cuenta que Barcelona era más vanguardista, sin embargo sus amistades cercanas en la capital y su inminente boda con Maricarmen llegaron a ser lo más importante en su vida en dicha época, por lo que se quedó en Madrid durante los años siguientes. Durante ese tiempo, su dirección artística básica se mantuvo más bien como un "pasatiempo" que como un trabajo esencial. Antes de regresar a la República de China en 1981, Chuang Pu presentó seis exposiciones tanto individuales como colectivas, con otros artistas chinos. Una vez aqul y con el estimulo de sus amigos, Chuang decidió presentar su curso artístico. Con la ayuda de Maricarmen (tanto financiera como personal) para realizar sus ideas sobre los lienzos, Chuang presentó cinco exposiciones durante los últimos cuatro años. Se le concedió un reconocimiento especial por su contribución local al desarrollo del arte, en forma de un premio por NT$10.000, por parte del alcalde de Taipei, en nombre del Museo de Arte de Taipei. Al crear cualquier nueva obra, Chuang Pu trata de encontrar inspiración finita a través del proceso de ensayo y error. Una vez que su mente ha concebido una idea -dice- tiene que trabajarla; pero realmente, la obra de formación rehusa frecuentemente, acomodar el ideal y las técnicas experimentales o el drástico reproporcionamiento podrían llegar a ser necesarios. Cuando las deseadas relaciones entre logro e ideal rehusan materializarse, Chuang enfrenta pesadas cargas de energía psicológica e incluso, algunas veces, materiales. Buscando una forma de describir la tendencia de su futuro desarrollo a corto plazo, Chuang sugirió que la tendencia es hacia "el arte mínimo", como fue evidenciado en sus expresiones de formas especiales y colores primarios en la Galería Spring. Chuang encuentra especial placer en el reconocimiento a la actual etapa de su arte y a la emoción ofrecida por la experimentación. Considera que Taipei es un excelente ambiente para su propio desarrollo artístico personal. A pesar de todo, es una persona que prefiere, al igual que muchos otros artistas en otros países -sea en una u otra forma- vivir una contradicción; debe desarrollarse concentradamente y alejado de muchas de las preocupaciones de la sociedad de la cual depende, hasta alcanzar el éxito, llegando así a una búsqueda, después de un estado de completa conciencia intelectual. □

Popular

Más reciente